Para Soledad Villamil, cantar no es solo interpretar con su voz, sino también con la palabra. “Me gusta ilustrar las canciones, contextualizarlas, hablar del autor, del momento en que fueron escritas, o simplemente compartir una imagen que evocan. Me gusta explorar en el escenario cuando canto, no es solamente las notas, sino que es todo lo que moviliza a mí cuerpo con esa canción y con eso que estoy contando”, explicó este martes la actriz y cantante en la 750.
En una charla distendida con Víctor Hugo Morales, Villamil contó además que su apellido proviene de Asturias, España, específicamente de un pequeño municipio al borde de Galicia, en una zona de montaña cercana al mar: “Es un pueblo muy rural, sobrio, de unas 300 personas. Ahí vivió mi bisabuelo, el abuelo de mi papá y sus hermanos. Cuando la visité me impactó porque me encontré con un paisaje de casas sencillas con pequeñas granjas. Pero en medio de estas casas, una gran casona con una palmera resaltaba por su tamaño: esa casa se construyó con el dinero que se mandaba desde la Argentina a Europa a la familia que había quedado ahí”, reveló.
Durante su paso por España, la artista llevó su música por distintos escenarios: “Hice shows en el Teatro Español de Madrid, donde realicé funciones durante 2021”, destacó. Y recordó una experiencia en la librería La Mistral, propiedad de una amiga cercana. “Ella tiene un espacio en el sótano de la librería y me propuso hacer un show ahí. Preparamos con mi marido, Federico Olivera, un show de canciones, y al estar en una librería tuvimos la excusa de leer textos. Fue un formato hermoso que sería buenísimo traerlo a Buenos Aires”, sostuvo.
Además, consultada por sus influencias, Villamil destacó a Mercedes Sosa, a quien considera un emblema de la cultura argentina. “Hace poquito estuve en el norte del país, iba por las rutas entre Salta y Jujuy escuchándola. Ahí sentís que su voz proviene de esa geografía tan profunda, tan relevada. Esa voz que sale a cantar y nos habla de una Argentina que está viva”, comentó.
Por último, compartió una reflexión sobre su forma de vivir el escenario: “La música me acompaña constantemente. Siempre estoy cantando o con alguna melodía dando vueltas en la cabeza. En este último tiempo estuve muy dedicada a la actuación y extrañaba mucho subir al escenario a cantar", señaló.
"Claro que los nervios siempre están antes de salir: las preguntas, la sensación de vértigo en vivo, pero eso también forma parte del encanto del show”, concluyó.