La ex funcionaria nacional en los mandatos de Sergio Massa y Javier Milei, y ex secretaria de Minería y Energía de la provincia, Flavia Royón, fue una de las ganadoras de las elecciones legislativas del pasado domingo 11 de mayo. 

Desde el espacio Frente Vamos Salta, Royón conquistó una banca en la Cámara de Diputados de la provincia, acompañada por el actual secretario administrativo de la Cámara Baja, Gastón Galíndez. Ambos debutarán como legisladores a partir del 10 de diciembre y aportarán aire fresco al bloque oficialista en un escenario político reconfigurado, donde la participación fue baja, pero los resultados dejaron varias lecturas.

Con un oficialismo que logró 11 de las 12 bancas en juego para el Senado y 20 de las 30 diputaciones renovadas, el gobierno de Gustavo Sáenz sale fortalecido en los números de este turno electoral. Pero el dato no menor es la consolidación de referentes con experiencia en la gestión y sin historial legislativo, como es el caso de Royón. “Estoy más que satisfecha con los resultados. Un mes atrás en las encuestas no aparecía y terminé siendo la tercera candidata más votada”, expresó la diputada electa en diálogo con Salta/12.

La campaña estuvo marcada por su brevedad y por el escaso volumen de propuestas. En ese contexto, Royón aseguró que fue una de las pocas que hizo eje en temas concretos, sobre todo vinculados al empleo formal y la economía productiva. “Yo sí hice propuestas, hablé del empleo de calidad y de temas estructurales. Es cierto que fue una campaña silenciosa, sin demasiada propuesta por parte de varios sectores, y eso también explica en parte lo que pasó con los libertarios, que sorprendieron con bancas que no estaban previstas”, analizó.

La referencia apunta al desempeño inesperado de La Libertad Avanza en algunos departamentos del interior, sobre todo en la Capital, donde logró conquistar el primer lugar con más del 34% de los votos. Según Royón, esa irrupción “responde más a una elección de sello, a un voto de protesta, que a una propuesta clara. Fue una campaña con muchas chicanas políticas y poca profundidad”.

Como segunda fuerza estuvo el Frente Unidos por Salta, que sacó el 16,29%, y le siguió el Frente Vamos Salta, que encabezaba Royón, con el 11,47% de los votos. 

La baja participación y el debate por la "nacionalización"

La participación en estas elecciones volvió a ser baja, una tendencia que se ha mantenido constante en los últimos turnos legislativos. No obstante, resultó mucho más baja de los esperado. En el escrutinio definitivo que se dio a conocer ayer se evidenció que de los 457.642 empadronados en Capital, sólo emitieron su voto 213.068 personas, representando el 46,54% de participación ciudadana. 

“Es algo que ya se viene viendo. La gente suele estar más pendiente de las elecciones ejecutivas, a gobernador o presidente. Sin embargo, el ambiente fue tranquilo, sin grandes tensiones”, explicó Royón.

El lunes post electoral, el gobernador Sáenz aseguró que los comicios se habían “nacionalizado”, sobre todo en la Capital. Royón, sin embargo, no compartió del todo esa lectura. “Lo que muestra esta elección es que las provincias tienen una identidad política muy fuerte. El oficialismo provincial fue el gran victorioso y eso da cuenta de que los partidos provinciales siguen teniendo peso real. No veo tanta nacionalización”, sostuvo.

Para la flamante diputada electa, lo que sí quedó evidenciado es el fracaso de las intervenciones políticas desde Buenos Aires. “Los grandes perdedores fueron el Partido Justicialista y el PRO, ambos intervenidos desde la Capital Federal. Y eso la gente lo percibe, no quiere que desde afuera les impongan referentes. Hay que aceptar que las provincias tienen autonomía política y construir desde ahí”, añadió.

Un nuevo mapa legislativo

El ingreso de Royón y Galíndez continúa la afinidad con el Ejecutivo. “La sociedad pide renovación, gente que entienda la política desde otra propuesta. Eso es un desafío, porque también implica construir legitimidad desde el trabajo legislativo”, reflexionó la diputada electa. 

En ese marco, el oficialismo no sólo sostiene su mayoría, sino que incorpora figuras con perfil técnico y trayectoria en la gestión, algo que podría influir en el rumbo de los debates legislativos en los próximos años. “Ya estoy trabajando en propuestas. Me reuní con la ministra de Educación y con sectores privados para avanzar en proyectos de capacitación minera, por ejemplo. Me debo una charla con compañeros y con actores del Ejecutivo para ver cómo articular propuestas de ley”, adelantó.

Con un perfil técnico marcado por su paso por organismos públicos y privados vinculados a la energía, el comercio exterior y la industria, Royón se presenta como una figura “puente” entre la política y los sectores productivos. Afirmó que "hoy uno de los mayores reclamos es el acceso al trabajo formal. La vivienda y el empleo son urgencias reales y eso va a estar en la agenda de mi gestión legislativa”.

Royón es ingeniera industrial. Fue secretaria de Energía de la Nación entre agosto y diciembre de 2023, durante el gobierno de Alberto Fernández, bajo la conducción de Sergio Massa en el Ministerio de Economía, y secretaria de Minería de la Nación del Ministerio de Economía, bajo la lupa de Luis Caputo, entre diciembre de 2023 y febrero de 2024, en la administración de Javier Milei.

La flamante diputada electa sabe que su rol será clave no solo por el respaldo que logró en las urnas, sino porque forma parte de una renovación que busca legitimar al oficialismo con figuras nuevas, pero con trayectoria, y así poder sostener el debate en temas concretos, como la minería y la energía, que son de sumo interés para el oficialismo. “Hay que construir consensos, pero también aportar ideas nuevas. No se trata sólo de administrar la mayoría, sino de ser útiles a la gente que votó y también a la que no lo hizo”, concluyó.